Maldivas, un destino de romance. Foto: Unsplash

La prestigiosa cadena hotelera Marriott amplía su cartera de Le Meridien Hotels & Resorts con uno de los destinos de luna de miel favoritos del mundo, las islas Maldivas, informan hoy medios internacionales.

El nuevo inmueble, Le Meridien Maldives Resort & Spa, de 141 villas, se encuentra en el atolón Lhaviyani en Thilamaafushi, una isla rodeada por una laguna resplandeciente y arrecifes de coral repletos de vida marina vibrante, que incluye grupos de mantarrayas y tortugas.

Rajeev Menon, presidente de Asia Pacífico, excepto China, de Marriott International, ha señalado que «estamos encantados de presentar la icónica marca Le Meridien en las Maldivas, lo que fortalece nuestra presencia en este cautivador destino. La apertura de Le Meridien Maldives Resort & Spa marca la segunda propiedad de Marriott International que se inauguró en las Maldivas este verano y la séptima entrada de la marca en el destino. Esperamos ampliar aún más nuestra cartera en las Maldivas para ofrecer experiencias distintivas y personalizadas para los viajeros».

Le Méridien Maldives Resort & Spa, de 141 villas, se encuentra en el atolón Lhaviyani en Thilamaafushi, una isla rodeada por una laguna reluciente y arrecifes de coral repletos de vida marina vibrante, que incluye grupos de mantarrayas y tortugas. 

Este nuevo complejo ofrece a los huéspedes una selección de villas de una, dos y tres habitaciones, dos piscinas infinitas, un spa, seis restaurantes y bares, un gimnasio y un pabellón de yoga frente al mar, un estudio interactivo de artes creativas y un club infantil.

El Marine Hub en el resort ofrece una variedad de programas de conservación que incluyen protección de manglares y pastos marinos e identificación de tortugas y snorkel con el biólogo marino, con la oportunidad para que los huéspedes nombren una tortuga por sí mismos.

Los huéspedes pueden descubrir un parque acuático en el arrecife de la casa del resort que cuenta con cuatro sitios de buceo y una thila (montaña marina), todos llenos de tortugas verdes y carey, varias rayas, cardúmenes de peces de colores y muchos más habitantes de arrecifes únicos que esperan ser descubiertos.

Los huéspedes también pueden embarcarse en expediciones marinas más lejanas a algunos de los 50 sitios de buceo y thila del atolón. A la espera de ser explorada se encuentra la isla privada del complejo, Bodu Finolhu, con vegetación tropical y una playa de 360 ​​grados.

(Con información de Expresso)

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