La Habana, sede de cursos del programa Transcultura de la Unesco

Jóvenes caribeños y cubanos inauguran primera ronda de cursos del Polo Caribeño de Formación Cultural. Foto: Prensa Latina.

Por Daily Pérez Guillén.

Geury Brousseau es maestro de Educación Artística en República Dominicana, llegó a Cuba para asistir al curso «El arte de la forja o la conquista del Hierro». Daniela Romero estudió enfermería en Belice y lo ejerció por algún tiempo, pero las redes sociales y la fotografía son ahora su profesión. En el Instituto Superior de Arte de La Habana espera compartir lo que ha aprendido de modo autodidacta y ampliar sus conocimientos. Marie Francia Sterlin es haitiana de nacimiento y estudia música en República Dominicana. En los próximos días, en la Universidad de las Artes disfrutará de la oportunidad de interpretar los ritmos de su país  junto a los de otras naciones del Caribe.

Ellos son parte de los mil trescientos jóvenes profesionales de la cultura que en diecisiete estados caribeños se han beneficiado con el programa «Transcultura. Integrando a Cuba, el Caribe y la Unión Europea mediante la Cultura y la Creatividad» y que por fin, a partir de este 2 de octubre de 2023, pueden asistir a una ronda de cursos de modo presencial con sede en La Habana.

Foto: DPG/TTC.

«Nunca perdimos de vista nuestra intención original: cursos presenciales en los que jóvenes de toda la región pudieran reunirse, interactuar e intercambiar conocimientos y experiencias. Así pues este es el día en que nuestros esfuerzos y nuestra espera dan sus frutos», palabras de Anne Lemaistre, directora y representante de la Oficina Regional de Cultura para América Latina y el Caribe de la UNESCO, quien desde el Convento de Santa Clara, en el Centro Histórico de La Habana Vieja, dio la bienvenida a los jóvenes.

Quince millones de euros ha dispuesto la Unión Europea para esta, la mayor iniciativa de la UNESCO en el continente. Se trata de un programa de cooperación cultural que tiene como objetivo aprovechar la rica diversidad cultural caribeña para convertirla en un motor de desarrollo sostenible en la región. Dos son sus pilares fundamentales: la profesionalización del sector cultural y creativo en el Caribe, y el otro, crear oportunidades de carrera a través del apoyo al emprendimiento, la creación de redes profesionales, el acceso a nuevos mercados y la integración de las industrias culturales y creativas en el sector turístico.

Marie Francia Sterlin es haitiana de nacimiento y estudia música en República Dominicana. Foto: DPG/TTC.

En el propósito de fortalecer las capacidades de los jóvenes, el programa ha unido a instituciones educativas del área para crear un polo caribeño de formación cultural. Del total de siete, seis son cubanas: la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños, la Universidad de las Artes, el Instituto Superior de Diseño, el Colegio San Jerónimo de La Habana, la Escuela Taller La Habana «Gaspar Melchor de Jovellanos» y el Colegio Santa Clara para la Formación en las Artes y los Oficios de la Restauración de Cuba y el Caribe.

El viceministro de Cultura de Cuba, Fernando León Jacomino, invitó a los jóvenes a descubrir toda la riqueza cultural del país anfitrión y a beneficiarse de la experiencia de profesionales con muy altas competencias en las diversas materias propuestas.

Mil trescientos jóvenes en diecisiete estados caribeños se han beneficiado con el programa «Transcultura». Foto: DPG/TTC.

En intercambio con la prensa, Lemaistre evocó al Historiador de la Ciudad, pues «la idea de este proyecto viene realmente de un sueño de Eusebio Leal», minutos antes había lamentado su ausencia porque «sabemos que estaría orgulloso». 

A la sesión inaugural del Polo de Formación Cultural asistieron también la embajadora de la UE en Cuba, Isabel Brilhante; la presidenta de la Comisión Nacional Cubana de la Unesco, Dulce Buergo; y la presidenta de la Junta del Polo Caribeño de Formación Cultural, Gladys Collazo.

Transcultura también busca la promoción de un turismo cultural sostenible que genere oportunidades de empleo para los jóvenes profesionales de la cultura de la región y en ese sentido ha desarrollado el estudio «Conectando los recursos culturales y del Caribe con las oportunidades de desarrollo turístico».